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Los sistemas de agua fría/caliente consisten en instalar un equipo central denominado enfriador de líquidos (chiller o mini-chiller), el que va a suministrar agua fría (a aprox. 7ºC), generando el sistema de frío; y una caldera ó calentador de agua, el que entregará agua caliente (a aprox. 70/75ºC) al sistema, generando la calefacción.
El suministro de agua fría ó caliente se realiza por medio de una red de tuberías hasta las unidades interiores (unidades terminales ó evaporadoras), que se instalan dentro de cada zona a acondicionar, impulsándose el agua con una bomba centrífuga desde la Sala de Máquinas hasta cada unidad interior.
Estas unidades terminales cuentan, en su interior, con un serpentín de cobre, con aletado de aluminio, por él cuál circula el agua (fría ó caliente), y por medio de un ventilador silencioso, recircula el aire del ambiente a través del serpentín de la evaporadora, y de esta forma se realiza el intercambio de calor deseado dentro de la habitación. Estas unidades se comandan con un termostato de ambiente individual, el que le da una total independencia de uso del resto del sistema, asegurando el confort deseado y haciendo que sea uno de los sistemas más flexibles de los existentes en el mercado.
El sistema tiene la opción de poder tener las evaporadoras a la vista u ocultas, por diseño y gusto del cliente, y sobre todo, para darle la mejor estética a cada espacio.
Las grandes ventajas de este sistema, son que se puede llevar agua fría ó caliente por las tuberías, a cualquier distancia y sin ocupar demasiado espacio físico en la obra.
También una gran ventaja, es que se puede acumular agua fría en tanques, lo que asegura tener la capacidad necesaria, en los momentos de mayor requerimiento, y además, bajar la capacidad a instalar, llegando a instalar un 70/75% de la potencia instalada en sistemas por expansión directa (aire acondicionado tradicional).
En definitiva, este es uno de los sistemas de refrigeración más eficientes que se pueden instalar y es de suma importancia en la industria alimentaria, en la ingeniería de proceso, y en la climatización, usándose mucho en grandes edificios, restaurantes, hoteles, departamentos, oficinas o construcciones con poco espacio en plafones (entre cielorraso y fondo de losa), que impide la instalación de ductos de aire de gran tamaño.